A las organizaciones
defensoras del medio ambiente nacionales e internacionales.
A los movimientos
civiles, estudiantiles y organizaciones de trabajadores.
El problema de la
autoridad es su credibilidad. El problema de la ley es esta autoridad sin
credibilidad. La causa de que el victimario comúnmente se convierta en víctima,
es el problema de los dos elementos anteriores. La ley no tiene hoy credibilidad.
Primero, porque es violada a diario, segundo por la impunidad con la que se está
utilizando por parte de las autoridades y los gobiernos. La ley se ha vuelto un
instrumento punitivo para criminalizar y perseguir a líderes de movimientos
sociales.
“Daño forestal en perjuicio del Estado” es
la acusación que se les imputa, en el proceso penal en contra de los defensores
del bosque y miembros de la cooperativa El Ocotenco de Zacacuautla, Hidalgo, a
Filiberta Nevado y Trinidad Templos. El hecho es que un particular, que es
Pedro Canales, es quien esta talando el bosque en complicidad con la autoridad
que le otorga los permisos de aprovechamiento, aún y cuando se ha documentado
que Pedro Canales ha estado utilizado documentos falsos para acreditar su
supuesta propiedad de más de cincuenta hectáreas de bosque, las cuales ha
estado devastando desde hace poco más de diez años en la comunidad de Zacacuautla.
Esta situación
tendría que ser revisada por el derecho nacional e internacional, pues se están
violando los derechos reconocidos de los pueblos a su territorio y sus formas
de vida y desarrollo. Sin olvidar que los gobiernos están faltando a su obligación
evitar que se afecten los ecosistemas.
La autoridad está
solicitando cárcel o el pago de una fianza de 100,000 pesos
por cada uno de los acusados, y con esto evitar su detención y encarcelamiento,
una argucia legal más para intimidar y detener a los pueblos en su defensa contra
los despojos, devastaciones y daños al medio ambiente que están viviendo
constantemente.
Ante eso,
organizaciones sociales, estudiantes, académicos, artistas, investigadores y
trabajadores de la cultura, repudiamos la criminalización de la que son objeto
Filiberta Nevados y Trinidad Templos, defensores del bosque que ha luchado
siempre en favor del bien común y que hoy los gobiernos consideran un delito.
El único
horizonte de una verdadera justicia, ha de ser evitar la estigmatización criminal
de los movimientos sociales y sus dirigentes y autoridades con el objetivo ya
conocido de emprender una persecución policial y judicial en contra de estos.
- No más asesinatos
y encarcelamientos en Zacacuautla, Hidalgo.
- No más leyes
compradas ni autoridades vendidas.
- Por el respeto y
reconocimiento a los plenos derechos de las comunidades sobre sus recursos
naturales.
- Por el desistimiento de
las ordenes de aprensión en contra de los defensores del bosque Fliliberta
Nevados y Trinidad Templos.
- Exigimos al gobierno
federal y estatal una investigación de las autoridades que han sido cómplices
de Pedro Canales al permitirle y proteger sus acciones criminales en contra del
ecosistema.
- Porque se investigue a
Pedro Canales por la falsificación de documentos y de más actos delictivos que
ha cometido.